Cristina Vargas hace una maestría en Museología en la École du Louvre, en Francia.
Por Jaim Córdova. 19 febrero, 2014.Cristina Vargas Pacheco, profesora de la Facultad de Humanidades de la UDEP, que actualmente cursa una maestría en Museología en la École du Louvre (Francia), inició una pasantía en el Museo de América en Madrid. Su trabajo consiste en apoyar en algunos proyectos del Área de Servicios Culturales del museo, trabajando algunos contenidos sobre el Perú para aplicaciones informáticas.
Para la ex-estudiante de la Especialidad en Historia, el realizar estudios de posgrado en una École francesa le permite afianzar e incrementar los conocimientos que sus profesores le brindaron. “Lo fundamental de esta experiencia es enriquecerme cultural y personalmente: en clases, en las exposiciones, en las caminatas por la ciudad, en la constatación de las diferencias y similitudes, para luego volcarlo al servicio de los alumnos y, sobre todo, de la sociedad”, afirmó.
La docente explicó que el Museo de América posee la mayor colección peruana en España, y que esta destaca sobre las colecciones procedentes de otros países latinoamericanos. “Este museo es fascinante porque constantemente está ideando recursos para acercar el museo a la población, realizando trabajos de inclusión y trabajando con aplicaciones informáticas en sus colecciones”, indicó Cristina.
Visita a museos franceses
“El hecho de estar en uno de los principales destinos turístico a nivel mundial, como lo es París, me ha dado la oportunidad de visitar muchas exposiciones y de ver las últimas tendencias expositivas que se usan en los grandes museos franceses”, dijo Cristina.
Cristina descubrió el mundo de los museos por su primera pasantía que realizó, en el 2009 ,al Museo de Aquitania, ubicado al sur de Francia. En esa oportunidad desarrolló actividades de catalogación y registro en el área de la colección extraeuropea, particularmente en la colección peruana que alberga ese museo.
Además, la profesora está realizando una investigación en el Museo du Quai Branly (París), creado hace más de una década y que alberga colecciones de diversas civilizaciones de África, Asía, Oceanía y América.
Mirar de otra manera los museos
La docente explicó que la idea tradicional que se tiene sobre los museos es que son lugares aburridos, elitistas y donde siempre se muestra lo mismo. “Es por eso que muchas veces se piensa que, visitado una vez un museo, no hay necesidad de volver. Sin embargo, el museo puede ser -y debe ser- un verdadero catalizador cultural, educativo y social, y para que este tipo de institución cumpla con esas tareas, todas sus áreas deben funcionar de manera armónica y creativa”, añadió.
La experta aclaró que el museo es un organismo compuesto de diferentes elementos o partes.
“En primer lugar están las colecciones -las expuestas y las que se conservan en el depósito-, estas que implica todo un trabajo de profesionales para su conservación, protección e investigación.En segundo lugar esta el exponer las piezas, esto requiere un trabajo de museógrafos, equipo de conservación y evidentemente, de arquitectos que diseñen o modifiquen el edificio que alberga la institución para la adecuada presentación de las colecciones y para facilitar la accesibilidad física al público. En tercer lugar, la institución se interesa por los visitantes o públicos, por su educación, por la comprensión de lo expuesto y, por el desarrollo de su sentido crítico; y, hoy en día, porque el museo se constituya en un espacio de debate y reflexión”, precisó la profesora.
Cristina afirmó que actualmente el museo es una institución abierta y cambiante que,como lo dice la última definición de la UNESCO, no solo apunta al estudio, sino también al deleite o recreo, sin que ello signifique que deba convertirse en una suerte de Disneyland.